A la hora de comprar pescado ya sea fresco, enlatado o salado debemos tener en cuenta una serie de elementos, para saber si realmente el producto que vamos adquirir se encuentra en las condiciones adecuadas.
Recomendaciones a la hora de comprar pescado
Si queremos comprar pescado fresco, lo primero en lo que nos tenemos que fijar es en su olor y en el color de su carne. El producto debe oler a mar, y su carne debe ser blanca o ligeramente rosada, firme, elástica y resistente a la presión de los dedos.
En cuanto a la cola también debe ser firme, y sus ojos brillantes y saltones. Su vientre no debe estar abultado, y su piel debe ser brillante y húmeda, no grasosa y con las escamas bien adheridas. Si el pescado cumple con todas estas características, será un producto totalmente fresco.
Si el producto que queremos comprar está enlatado, lo primero que te recomendamos hacer es mirar la fecha de consumo preferente y el registro sanitario. A continuación, debemos tener cuidado de que la lata no esté abollada, hinchada, oxidada o con fugas. Y por último, si una vez en casa al abrir la lata sale gas o salta líquido de forma repentina, deséchala.
Y para terminar, si lo que deseas es comprar un pescado salado o seco, debes tener en cuenta que tenga un color uniforme, sin manchas rojas o amarillas de color óxido, y que cuente con una consistencia firme.
