El pescado es un alimento fundamental en nuestra dieta, ya que contiene un gran aporte de ácidos grasos omega-3, vitaminas y proteínas de alto valor biológico. Pero a menudo este alimento, no resulta muy apetecible para los niños.
¿Cómo podemos hacer para que nuestros hijos coman más pescado?
Si los niños tienen aún una edad temprana, es recomendable ofrecer pescados suaves como la merluza o la pescadilla, como primer contacto.
También existen algunas conservas de pescado que podemos ofrecerles como: el atún, el bacalao, las anchoas o las sardinas. Estas contienen calcio y además se pueden presentar en forma de bocadillo, para que les resulte más cómodo.
Otra forma de cocinar el pescado sin necesidad de que sea en una pieza o en lomos, es incorporándolo en croquetas, empanadillas, ensaladilla, en paella o en la misma sopa.
Finalmente, es interesante cocinar el pescado de forma diferente como al horno, a la plancha, o al vapor. Estos se pueden acompañar de salsa, pero sin grandes cantidades para no tapar del todo el sabor del pescado, solo como guarnición. Además, es imprescindible limpiar bien las piezas de pescado que daremos a los niños, ya que el encontrar espinas puede provocar un rechazo a este alimento.
Nunca es demasiado tarde para que nuestro hijo, le guste este alimento. Cuanto antes apliquemos estos trucos, más sencillo será incorporarlo en su dieta.
